La verdad es que la Ley no establece un plazo de vigencia del certificado de mediación frustrada, la costumbre es que los tribunales no aceptan, en su mayoría, certificados con una antigüedad mayor a los 6 meses. El motivo de aquello es simple, las relaciones de familia son relaciones dinámicas, esto quiere decir que a medida que transcurre el tiempo pueden ir cambiando en diversos sentidos, acercando a las personas o bien alejándolas y es por ello que, no siempre los motivos o circunstancias por los cuales se frustró una mediación en el pasado, necesariamente se mantienen en el presente.
Debemos recordar que la Mediación familiar es un mecanismo alternativo de resolución de conflictos y que además busca que las personas no tengan que judicializar sus problemas de familia, por ello nuestro consejo es, si necesita regular alguna materia o tema de familia, acuda o solicite una mediación familiar, puede llevarse una grata sorpresa y obtener en menor tiempo y a un menor costo la solución a su problema.
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